El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, reconoció esta mañana su derrota
en las elecciones bonaerenses al tiempo
que felicitó a la gobernadora bonaerense
electa, María Eugenia Vidal, y si bien dijo que no le quería
"quitar mérito", señaló que "ha tenido un impacto muy
fuerte" la denuncia en su contra
vinculada al tráfico de efedrina, a la que
volvió a definir como "una mentira atroz".

En
declaraciones formuladas en la Casa Rosada, el jefe de ministros volvió a apuntara "fuego
amigo" del propio oficialismo por esas
denuncias.
"Ahí hubo traición de otros dirigentes que lo pagaron en su distrito de la misma manera. Lo que sucedió
no es una casualidad, había fuego amigo
y ese fuego amigo creyó que me hacía un agravio
a mí, pero no se dieron cuenta que se estaban haciendo un agravio a sí mismos", remarcó.