La Cámara Argentina de Empresas Odontológicas (CAESO) fue creada hace dos meses con el objetivo de representar a los profesionales del sector y "tratar de encontrar puntos en común para ayudarnos mutuamente en los conflictos que puedan surgir", según indicó su presidente, Carlos Nápoli.
Nápoli explicó que la cámara surgió "para ocupar un espacio vacío en las paritarias del sector" ya que "no hay representantes de odontología". Sin embargo, aclaró que en las próximas negociaciones no participarán, ya que aún no cumplen con los requisitos para ser reconocidos por el Ministerio de Trabajo.
La CAESO ya reúne a las 15 empresas más importantes del sector, que atienden a más de 3 millones de beneficiarios del sistema de salud, tanto de obras sociales como de medicina prepaga. Nápoli informó que buscan también sumar empresas del interior del país, y definió a la entidad que encabeza como "una organización de servicio odontológico para prestar servicios a la población".
El presidente de la cámara indicó que "la mejor utilización de los recursos es el tema del momento", dado que "los recursos son limitados, tienen un margen según el presupuesto", y en cambio "la demanda es ilimitada".
Nápoli detalló que un "segmento muy importante" de esta problemática es "la conflictividad judicial" y el "crecimiento de la industria de juicios por mala praxis". En este sentido, afirmó que el sector está "jaqueado" por "el incremento del costo judicial".
Por otra parte, informó que el sector está regido por "las regulaciones típicas" del ámbito de la salud –como la obligación de estar debidamente capacitado y habilitado para ejercer la profesión-, y por el Programa Médico Obligatorio (PMO), que establece el valor de las prestaciones.
