En la mañana del miércoles, el intendente Municipal, Jorge Nedela, encabezó el acto conmemorativo por la “Revolución de Mayo de 1810”, con el izamiento de la Bandera Argentina, en el mástil ubicado en el Parque Cívico de la ciudad.
El encuentro contó con la presencia entre las autoridades de la presidente del Honorable Concejo Deliberante, Ana Lara; el secretario de Hacienda y Producción, Alberto Amiel; el secretario de Promoción Social, Manuel Simonetti; el secretario de Obras y Servicios Públicas, Raúl Murgia; el secretario de Salud, Alberto Augstaitis; el secretario de de Administración y Finanzas Carlos Carrizo; el secretario Privado, Miguel Caminos y el delegado Municipal Zona II, Carlos Lozano.
Tras el izamiento del pabellón nacional y de entonar las estrofas del Himno Nacional, el jefe Comunal y la presidente del Concejo Deliberante colocaron una ofrenda floral en el busto que recuerda la figura del General José de San Martín.
Ante los presentes Nedela repasó los acontecimientos que se dieron durante la histórica Semana de Mayo, haciendo alusión también al contexto internacional que se daba en esos tiempos.
Como cierre de la jornada, los presentes se acercaron hasta la Iglesia María Auxiliadora, en la que compartieron una Oración por la Paz, a cargo del párroco Gustavo Rubio.
“Esta es una fecha que nos hace reflexionar sobre cuestiones fundamentales como la libertad, y es por eso que tenemos que seguir trabajando en pos de esos objetivos libertarios”, reseñó el intendente municipal. “Debemos seguir el ejemplo de esos próceres que comenzaron a marcar el camino para la independencia de nuestro país. Cada hombre y cada mujer, desde nuestros lugares tenemos la responsabilidad de seguir dando pasos firmes para defender la libertad, la individual y la del conjunto”, sostuvo entre sus palabras.
En ese sentido y ante los presentes, Nedela se refirió a los valores que se deben respetar como sociedad, “cada uno de nosotros debe ser reconocido como individuo libre, por eso digo con orgullo que desde que llegamos a la gestión municipal se acabaron viejas costumbres y hoy ya no existe el clientelismo”, afirmó, para cerrar con una frase que quedó sellada por parte de los estudiantes durante la lucha por la Reforma Universitaria en Córdoba concretada en 1918, “los dolores que nos quedan son las libertades que faltan”.
